El venado de oro - Leyenda Bogotana Inspiración de la Comparsa de la Candelaria y les contamos la leyenda. La historia cuenta que en época de la conquista española, en el siglo dieciséis, los indígenas Muiscas escondieron muchos tesoros en cuevas, huecos y cerros inclinados alrededor de Bogotá. Y uno de estos tesoros fue escondido en una cueva del Cerro Guadalupe, era un venado de oro de tamaño natural junto con numerosas joyas indígenas creadas por los Muiscas. Cuentan que a finales del siglo diecisiete, llegó a Bogotá un portugués aventurero llamado Diego Barreto, un aficionado a los juegos de azar, quien se enamoró de la bella Bogotana Inés Domínguez, hija del comerciante Pedro Domínguez Lugo, quien era viudo. La casa de Inés y su padre estaba ubicada arriba del barrio Las Nieves, que limitaba al sur con el Río San Francisco, al norte con la Recoleta de San Diego, al oriente con los pies de los cerros de Monserrate y Guadalupe, y al occidente con la Alameda Viej...